Cada día llegan noticias desde los medios desacreditando la eficacia de los cigarrillos electrónicos para dejar de fumar. Como ya hemos informado en otros posts, detrás de estas noticias hay muchos intereses, sobretodo económicos.

Después de las noticias de las muertes por mezclar los e-liquidos con drogas como el THC en Estados Unidos, la gente que le interesa que sigas fumando, ha visto una gran oportunidad para meter miedo lanzando noticias falsas y manipuladas.

Las autoridades sanitarias de todo el globo están pidiendo más investigaciones acerca de los vapeadores, cuando las numerosas que ya existen son claras: los cigarrillos electrónicos son buenos para la salud siempre y cuando se usen debidamente.

¿Qué llevan realmente ?

Los liquidos para el uso en los cigarrillos electrónicos están regulados por la Unión Europea. La ley Española del vapeo, expresa que los liquidos para vapear no pueden contener aditivos NO PERMITIDOS como vitaminas u otros aditivos los cuales hagan creer que dicho producto aporta o reduce riesgos para la salud.

Frente a los más de 4.000 componentes del cigarrillo tradicional y responsables de unas 50.000 muertes al año solo en España, están los componentes de los líquidos para los vapeadores que son cuatro: propilenglicol, glicerina vegetal, aromas hidrosolubles y la nicotina, la cual podremos reducir o suplantar con el tiempo.

Los dos primeros (PG/VG) son alcoholes, no son lípidos como ocurrió con los usados en EEUU en las intoxicaciones. Estos alcoholes cuando entran en el organismo, se degradan y NO se depositan a nivel pulmonar. Estos componentes se usan ampliamente en la industria alimentaría y en algunos de la industria  farmacéutica, como en jarabes, aerosoles y supositorios por ejemplo. El propilenglicol es un secante, por eso a muchas personas les causa al principio tos y un poco de irritabilidad al inhalarlo, pero nada mas.

Los aromas son totalmente seguros como dice la FDA (Food and Drug Administration: Administración de Medicamentos y Alimentos​​ o Administración de Alimentos y Medicamentos)​, por lo tanto no tiene ningún daño sobre la salud.

El componente más polémico sin duda es la nicotina, la causante de la dichosa adición al tabaco. Una cosa que hay que dejar clara, ya que mucha gente no lo sabe o esta equivocada, es que la nicotina es cancerígena y no es así. La nicotina no es la que te mata cuando fumas, si no la que no te deja escapar del tabaco. Si la nicotina fuera cancerígena, no se podrían usar los aerosoles, parches o chicles de nicotina.

Conclusión

El cigarrillo electrónico esta diseñado y pensado para dejar de fumar, ya que no hay nada peor que el tabaco. No es un totalmente inocuo como han demostrado los estudios, ya que al calentar el liquido se liberan trazas de nitrosaminas, formaldehído y de algunos hidrocarburos por el calentamiento de las resistencias.

En todos los estudios se ha demostrado que son trazas, esto quiere decir que no son niveles superiores de los que puede haber en el aire de cualquier ciudad grande. Estas trazas son entre 10 y 100 veces por debajo de los limites que establece la Organización Mundial de la Salud como algo dañino. Por eso no se recomienda su uso a personas que nunca han fumado, ya que no es 100% sano para la salud.

La actual investigación americana apunta que existe evidencia concluyente de que la sustitución completa de los cigarrillos convencionales por los cigarrillos electrónicos, reduce la exposición de los usuarios a las sustancias tóxicas y cancerígenas presentes en los cigarrillos convencionales con su correspondiente beneficio. Recordemos que el tabaco tiene más de 4.000 sustancias tóxicas de las cuales 70 se han relacionado con el desarrollo directo de numerosos cánceres.

Existe la evidencia de que el cambio completo del cigarrillo convencional a los cigarrillos electrónicos, mejora la salud, así que no hay nada que temer.

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